Celdas un poco más grandes para combatir la masificación. La Secretaria General de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha reconocido en el Senado que la "principal dificultad" de su departamento "es el crecimiento constante de la población reclusa".
En la última década hemos pasado de tener 45.000 presos a más de 76.000, un 69% más. De todos ellos, el 35,5% son extranjeros. Con tal crecimiento, desde Prisiones saben que, de momento, parece una utopía cumplir con la Ley Penitenciaria, la primera que se aprobó en democracia, que fija un único preso por celda. El tiempo medio de estancia en prisión en España es de 18 meses, en la UE, 7,1
"A la vista de la evidente dificultad que vamos a tener durante un tiempo para que todos los internos puedan alojarse en celdas individuales, hemos ampliado el tamaño de las celdas en las cárceles de nueva construcción para mejorar su confortabilidad", explica Gallizo. Y es que ésta parece ser la fórmula para combatir la masificación de las prisiones: más centros y con celdas más amplias.
Las celdas de las nuevas cárceles pasarán de 11 a 14 metros cuadrados, con dos camas en litera, dos escritorios, una televisión y un baño incorporado que incluye plato de ducha. El plan de Instituciones Penitenciarias es poner en funcionamiento en los dos próximos años 9.000 nuevas celdas distribuidas en siete prisiones, 13 Centros de Internamiento Social (CIS) y tres Unidades de Madrid.
Este mismo año ya estarán operativas las cárceles de Mahón (Baleares), con 130 celdas; y Campos del Río (Murcia), con 1.194. En 2011 y 2012 se abrirán las prisiones de Ceuta, Canarias II, Álava, Navarra y Soria. Hay otros cuatro centros más programados en Guipúzcoa, Málaga, Valencia y Fuerteventura.
2.521 presos en 2009
En toda España (sin contar Cataluña) hay 38.000 celdas para cerca de 66.000 presos. Sólo en 2009 la población reclusa creció en 2.521 reos. Si se mantiene este crecimiento en 2010, 2011 y 2012, las 9.000 nuevas celdas casi absorberán a los 7.500 nuevos reclusos previstos.
En Cataluña, con las competencias transferidas, hay unas 8.000 plazas para unos 11.000 internos. También la Generalitat de Catalunya tiene previsto construir nuevas prisiones que le proporcionen 11.849 plazas de aquí a 2013, ya que para entonces prevén tener más de 12.000 presos.
Los sindicatos aseguran que las prisiones españolas tienen una tasa media de hacinamiento del 173%, y Gallizo asegura que "en España tenemos más internos porque se ha alargado el tiempo de cumplimiento de las condenas". Y culpa de ello a las reformas legales que hemos tenido, que han tipificado nuevos delitos (como la seguridad vial) y han endurecido las penas de otros. Y para demostrarlo da un dato. Si el tiempo medio de estancia en prisión es en la UE de 7,1 meses, en España es ya de 18 meses, cuando en el año 2003 era de 14,7 meses. D. FERNÁNDEZ. 18.05.2010 - 20 MINUTOS
La cifra de internos en las cárceles de Zuera, Daroca y Teruel y en los centros abiertos de Torrero y Huesca se ha duplicado en una década. Las estadísticas oficiales de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias señalan que en los centros de reclusión de la comunidad autónoma había ingresadas 2.603 personas en el mes de febrero, lo que prácticamente duplica los 1.301 contabilizados en los penales aragoneses en enero del 2000. Esas cifras indican que la población reclusa que se custodia en los centros penitenciarios aragoneses supera en un 72% las plazas habilitadas en ellos cuando fueron puestos en funcionamiento. 24/04/2010 EL PERIODICO DE ARAGÓN
La crisis económica se está convirtiendo en un obstáculo para la inserción laboral de las personas que salen de la cárcel tras cumplir sus condenas. Esta situación ha hecho que en los quince meses que van de enero del 2009 a marzo de este año el número de beneficiarios del subsidio para liberados de prisión en Aragón haya aumentado un 111% para pasar de 102 a 216, según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal facilitados por la Delegación del Gobierno.
En ese periodo también ha crecido, aunque en una proporción menor, el número de solicitantes de la ayuda, que ha pasado de 31 a 43. Esta cifra incluye tanto las altas iniciales como las prórrogas.
El aumento ha sido constante a lo largo de los quince meses en ambos epígrafes, en los que la cifra total de inscritos en el programa se ha duplicado: de 133 al comenzar el 2009 a 259 --216 perceptores de la ayuda más 43 altas y reanudaciones de la prestación-- al finalizar el mes de marzo del 2010.
PROVINCIAS Casi el 85% de las personas incluidas en el programa residen en Zaragoza --184 beneficiarios y 37 solicitantes--, mientras solo un 11% vive en Huesca --24 y cinco-- y apenas un 4% --nueve y uno-- está domiciliado en Teruel.
El subsidio, incluido en el catálogo de Prestaciones por Desempleo de Nivel Asistencial del Ministerio de Trabajo e Inmigración, tiene como objetivo colaborar en la reinserción de los expresidiarios proporcionándoles unos ingresos mínimos para tratar de evitar que reincidan en las actividades delictivas que les llevaron a la cárcel. El incremento de beneficiarios y de solicitantes da fe de las dificultades que, como el resto de desempleados, encuentran para acceder al mercado laboral.
Los expresidiarios reciben una prestación de 426 euros mensuales durante un periodo de seis meses prorrogable dos veces.
No obstante, en el caso de tener derecho al subsidio por desempleo para mayores de 52 años acceden a este último, el cual, en caso de haber cotizado al menos durante seis años, puede dar derecho a percibir 575 euros mensuales si el beneficiario tiene dos familiares a su cargo y a cobrar 715 si deben hacerse cargo de tres o más.
Para tener derecho a la ayuda, la reclusión debe haber sido de más de seis meses y el solicitante debe estar desempleado, inscribirse como demandante de empleo en el mes siguiente a la excarcelación --puede solicitarlo en los primeros quince días del segundo mes--, no haber rechazado en ese periodo ofertas de trabajo adecuadas a su situación ni propuestas formativas, no tener derecho a la prestación contributiva y no tener ingresos superiores a 474,97 euros mensuales --el 75% del salario mínimo interprofesional--.
El subsidio para liberados de prisión también está abierto a los menores de edad que hayan pasado más medio año en un centro de internamiento "como consecuencia de la comisión de hechos tipificados como delito" y que hayan cumplido los 16 cuando sean liberados. Igualmente pueden acceder, siempre que cumplan el resto de los requisitos y estén inscritos como demandantes de empleo, los extranjeros que no hayan alcanzado la mayoría de edad y que, tras ser liberados de un reformatorio, "se encuentren cumpliendo medidas judiciales de medio abierto".
TOXICOMANÍAS Por último, pueden acceder a las ayudas los convictos que hayan finalizado un proceso de deshabituación de su drogodependencia de más de seis meses de duración siempre que la ejecución de la pena de reclusión se les haya conmutado por ese tratamiento.
Esa situación solo se da en delincuentes para los que los tribunales establecen que su drogadicción es una circunstancia atenuante o eximente de su condena por situarse en el origen del delito que cometieron. 24/04/2010 E. BAYONA EL PERIODICO DE ARAGÓN
Los presos se amontonan en las tres prisiones aragonesas. Así lo ha puesto de manifiesto un informe del sindicato penitenciario Acaip, que sitúa la tasa de hacinamiento de las cárceles en un 172,13%, un porcentaje que coloca a la comunidad aragonesa algo por debajo de la media nacional (173,21%) y en el puesto número 11 de las 19 comunidades y ciudades autónomas. En total, Aragón cuenta con 1.507 plazas o celdas funcionales para una población reclusa que el pasado 19 de marzo era de 2.594 internos, 50 menos que en 2009.
De los tres centros penitenciarios de Aragón el que presenta un mayor grado de masificación es el de Teruel, dado que sus 75 celdas albergan 191 reclusos, lo que significa una tasa de hacinamiento del 254,67%.
La prisión turolense es la novena más sobreocupada de España. Está lejos de la de Martutene (Bilbao), que con el 437,86% es la cárcel más superpoblada de España, pero muy por delante de la de Zuera, que se sitúa en el puesto número 38, con 1.862 internos para 1.110 celdas funcionales, lo que arroja un porcentaje del 167,75%, incluyendo los centros de inserción social de Zaragoza y Huesca. El centro penitenciario de Daroca, en cambio, no figura en la lista de las prisiones más saturadas, calificación que merecen 41 cárceles en total.
El hacinamiento en las cárceles aragonesas es un fenómeno que se ha ido acelerando a medida que avanzaba la década 2000-2010, ya que en este tiempo se ha pasado de 1.139 a 2.594 presos. El incremento entre una y otra fecha ha sido de 1.455 presos o, en términos porcentuales, de un 127,74%, solo por detrás de la Comunidad Valenciana, que ha experimentado un crecimiento del 140,12%.
RALENTIZACIÓN El aumento del número de reclusos en Aragón, según Acaip, se ha ralentizado, últimamente, pues entre el 2008 y el 2009 el incremento fue solo de 87 reclusos, lo que llenó los presidios un 3,40% más.
Acaip señala en su informe que en la actualidad las cárceles españolas albergan más de 76.756 presos, de los cuales 27.067 (el 35,51%) son extranjeros y 3.198 han ingresado en los últimos 14 meses. Estos valores colocan a España en el puesto número cinco de Europa por su población reclusa, por delante de 52 países.
Lo preocupante es que la población reclusa no para de crecer, dado que actualmente avanza a un ritmo de 8,68 presos cada día. El año más negro fue el 2008, con 6.381 nuevos internos, la cantidad más elevada de la democracia, que se nutrió sobre todo de los nuevos delitos contra la seguridad del tráfico. 26/03/2010 EL PERIÓDICO DE ARAGÓN
Alrededor de 720 presos de las cárceles de Zuera y Daroca solicitan anualmente algún tipo de asistencia psiquiátrica. Según los datos que tiene el Ministerio de Justicia del año 2008, fueron 520 internos de la prisión de Zuera (con una población reclusa de aproximadamente 2.000 internos) y 196 en la de Daroca. Estas consultas son atendidas por un psiquiatra del Servicio Aragonés de Salud junto a otros ocho profesionales, que son psicólogos, educadores y psiquiatras.
A pesar de este dato, tan solo un 4% de los presos recibe asistencia psiquiátrica de forma continuada en cada uno de los dos centros penitenciarios. En ambos casos existe un plan de atención especial e integral para enfermos mentales, y acude un psiquiatra cada diez días. Además, hay 70 internos que reciben un protocolo permanente de prevención de suicidios. Sin embargo, y pese a todos estos datos, Zuera ostenta el triste récord de reclusos fallecidos en las celdas españolas. Desde su inauguración, en el 2001, han fallecido más de 30 presos.
DELITO Y PATOLOGÍA Hasta agosto del 2009, las dos cárceles zaragozanas albergaban a 16 personas sometidas a medidas excepcionales de seguridad por la aplicación de una eximente incompleta, es decir, eran personas presas con patologías psiquiátricas que les había inducido a cometer delitos por los que estaban recluídos.
Junto a los programas de atención integral para reclusos con enfermedades mentales, Instituciones Penitenciarias ha puesto en marcha otros planes para intentar ofrecer una mejor calidad de vida asistencial a la población presa en Aragón. Así, se atiende a una media anual de 93 internos drogodependientes a los que, junto a Cruz Roja, Proyecto Hombre, Comunidad El Frago y Pastoral Penitenciario se les intenta ayudar para que superen su adicción.
Otros planes tienen menos éxito de participación, aunque se prestan también. Es el caso de un programa que en colaboración con FEAPS, atiende a tres reclusos al año con discapacidad intelectual. Asimismo, se presta asistencia especial a 15 internos que así lo han querido voluntariamente. De hecho, todos estos planes se caracterizan por ser en su mayoría voluntarios.
El programa que tiene menos aceptación es uno específico contra la violencia de género. Se han realizado dos cursos pero en las dos ediciones solo ha habido siete reclusos interesados en participar, a pesar de que hay más presos por estos delitos.
La violencia de género llena cada vez más las prisiones españolas. A finales de noviembre, eran ya 8.639 las personas que estaban encarceladas con al menos una causa por agresión machista, según los últimos datos de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, a los que ha tenido acceso Público.
Con ese número de internos se podrían llenar seis cárceles de tamaño tipo, con capacidad para 1.500 reos cada una. De hecho, los maltratadores suponen ya el 13% de la población reclusa total en España, que actualmente es de 66.226 presos. Y ello a pesar de que las primeras condenas por violencia de género por delitos menores no comenzaron a imponerse hasta 2005.
IGUALDAD TEME QUE LOS CRÍMENES SE DISPAREN ESTOS DÍAS, COMO EN 2008
La elevada cifra supone, además, un incremento del 27,2% respecto a la de finales de 2008, cuando el número de internos con alguna causa de violencia de género en su expediente era de 6.790. Sin embargo, el incremento más significativo se ha producido entre aquellos presos cuyo único delito es, precisamente, la agresión machista.
Si a finales del año pasado eran 2.615, ahora son 3.925. Nada menos que un 50% de aumento en sólo un año, según los datos que maneja el departamento de Mercedes Gallizo. Sólo los condenados por delitos contra la seguridad vial han experimentado un crecimiento mayor en estos últimos 12 meses.
Este crecimiento exponencial en los datos de reclusos cuyo delito principal es la violencia de género fue especialmente significativo el pasado mes de mayo, cuando ingresaron en prisión un total de 491 maltratadores. Es decir, 16 cada día. De hecho, sólo en los diez primeros meses del año habían entrado en prisión 1.191 nuevos reclusos por violencia de género. En 2008 la cifra fue de 689, casi la mitad. En mayo, mes con más ingresos, entraron en prisión 16 agresores al día
UN TERCIO, POR MALTRATO
Los malos tratos son el delito principal entre estos presos, según las cifras de Instituciones Penitenciarias.
Uno de cada tres reos está acusado de ellos. Le siguen los acusados de haber quebrantado la pena o la medida de alejamiento (15%), los que han realizado amenazas (14,9%), los que han provocado lesiones (13,5%) y los que sometían a sus parejas a "violencia habitual" (10,5%). Estos cinco delitos representan, de hecho, al 87,2% de todos los intentos. Los casos más graves, homicidios o asesinatos, sólo suponen el 5% del total.
Curiosamente, también hay un 0,6% de presos por faltas de violencia de género, un tipo de infracción penal que en otros delitos sólo conlleva una pena de multa. Un detalle que no pasa inadvertido para algunos juristas, que critican que el Código Penal castigue con especial dureza las agresiones machistas.
LA VIOLENCIA MACHISTA ES EL DELITO ÚNICO DE 3.925 RECLUSOS
Sin embargo, los maltratadores son, después de los condenados por delitos de tráfico, los principales beneficiarios de la suspensión de la pena a cambio de tratamiento o de realizar trabajados en beneficio de la comunidad.
Del 1 enero al 30 de noviembre (últimos datos disponibles), se habían suspendido 20.515 penas a condenados por violencia de género a cambio de asistir a un programa de tratamiento. De ellos, 16.530 ya lo habían cumplido.
Mayor es el número de beneficiados por realizar trabajados para la comunidad. En 2008, 11.604 condenados habían evitado el ingreso en prisión por este sistema. En lo que va de año, ya han sido 26.324.
De hecho, los agresores machistas suponen el 19% de todos los condenados que consiguen acogerse a esta medida. De nuevo, sólo son superados por los autores de delitos contra la seguridad vial, que acaparan el 75% de las suspensiones de pena por trabajos en beneficio de la comunidad.
LOS TEMORES DE IGUALDAD
Mientras tanto, las estadísticas de víctimas mortales por violencia de género muestran por primera vez desde que se hace recuento un descenso considerable. A 21 de diciembre, el departamento de Bibiana Aído había contabilizado 53 crímenes machistas, aunque mantenía otros cuatro "en investigación", ante las dudas de que realmente pudieran considerarse como tales.
En 2008, en esa misma fecha, ya se habían producido 71, que, además, en los últimos diez días del año se dispararon a los 76, después de que en las últimas jornadas de año se produjeran cinco, uno cada dos días.
De hecho, altos responsables de Igualdad reconocen su temor a que con motivo de las fiestas navideñas vuelvan a dispararse las agresiones mortales. Además de en 2008, ya ocurrió algo similar en 2006. Entonces, se registraron tres crímenes machistas en los diez últimos días del año. PUBLICO (Ó. LÓPEZ-FONSECA)
Instituciones Penitenciarias informó hoy de que un 7,8 por ciento de los presos internos en las cárceles españolas están infectados del virus del VIH, un porcentaje sin embargo "sensiblemente menor" al 18,6 por ciento del año 1998.
Con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, hoy 1 de diciembre, Instituciones Penitenciarias informó de que la prevalencia de la infección VIH en la población reclusa es de un 7,8 por ciento en los internos de los centros penitenciarios dependientes de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias.
Sin embargo, destacó que este porcentaje es "sensiblemente menor" al de 1998, cuando un 18,6 por ciento de los internos era seropositivo. En ese año comenzaron a implantarse todas las medidas contra la infección y se extendieron los tratamientos para los infectados en las prisiones españolas.
Estas medidas permitieron reducir tanto los contagios como la aparición de la enfermedad del sida entre los reclusos de manera muy significativa, pese a lo que a lo largo del año 2008 se declararon 42 casos de sida en todo el sistema penitenciario español. DIARIO SIGLO XXI - EUROPA PRESS.2 de diciembre de 2009
En España, más de la mitad de los/as presos/as están privados de libertad por delitos relacionados con las drogas. Con motivo del día de la Merced, la Fundación Atenea hace hincapié en la necesidad de trabajar en las cárceles la atención psicológica y social de los/as reclusos/as drogodependientes en tratamiento y su preparación a la libertad.
NOTICIAS MEDICAS.- Actualmente, más de la mitad de los 75.546 presos/as de las cárceles españolas están privados/as de libertad por delitos relacionados con las drogas, bien por consumo de sustancias, bien por lo que se conoce como delito funcional: acciones cometidas bajo la influencia de las drogas o con el fin de conseguirlas (tráfico, agresiones, robo, contrabando de estupefacientes, delitos contra la salud pública).
Con motivo del día de la Merced, patrona de las personas privadas de libertad, que se celebró ayer el 24 de septiembre, la Fundación Atenea llama la atención sobre la necesidad de trabajar en las cárceles la atención psicológica y social de los/as internos/as drogodependientes en tratamiento.
La estancia en prisión debe constituir un momento de cambio para el/la interno/a, de abandono de su adicción y de preparación para su posterior reintegración en la sociedad, afirma Miguel Pérez-Lozao Gallego, director de la Fundación, que trabaja desde 1985 en cárceles de toda España.
Con ese objetivo, el programa Ariadna de la Fundación, Medalla de Bronce al Mérito Social Penitenciario, facilita la reinserción social y familiar de los reclusos/as al término de su condena, apoya a los/as presos/as en su proceso de abandono del consumo de drogas y trata de mejorar su calidad de vida.
Según el mito griego, Ariadna es el alma que ayuda a Teseo a salir del laberinto, cuando éste se siente desesperado. Ariadna le ofrece el ovillo que le ayuda a encontrar la salida, la llave para solucionar el problema. Eso es lo que intentamos con este programa: llevar a cabo diversas acciones que van desde talleres de educación para la salud a la prevención de recaídas y la preparación para la libertad, continúa Miguel Pérez-Lozao Gallego.
FUNDACION ATENEA
La Fundación Atenea es una organización profesional del Tercer Sector, comprometida con los derechos sociales y de ciudadanía, que promueve el cambio social y los valores de igualdad y fomenta las oportunidades para las personas en situación o riesgo de exclusión social.
Los delitos contra el patrimonio se dispararon en Aragón el año pasado, el primer ejercicio en el que dejó sentir sus efectos la crisis que hoy deja sin empleo a más de 90 ciudadanos cada día. La Memoria de la Fiscalía, hecha pública ayer coincidiendo con la apertura oficial del año judicial, revela un espectacular incremento de los hurtos, los robos y las estafas en las tres provincias aragonesas. Los delitos contra el patrimonio fueron la causa de más de la mitad de las causas abiertas en las tres provincias aragonesas.
Las fiscalías de Huesca, Teruel y Zaragoza abrieron el año pasado diligencias por 26.164 episodios de hurto frente a las 17.800 del ejercicio anterior, lo que supone un aumento del 46,9%. Cuatro de cada cinco --21.815-- se registraron en Zaragoza.
Las estafas pasaron en doce meses de 1.721 a 2.585, incremento que rebasa el 50%. El grueso de los timos y fraudes se produjo en Zaragoza, con 1.854, si bien los crecimientos fueron cualitativamente más destacados en Huesca y Teruel: en la primera aumentaron un 122%, al pasar de las 240 del 2007 a las 533 del 2008, y en la segunda prácticamente se duplicaron --de 106 a 198--.
Los datos del ministerio público también revelan un claro aumento de los robos en domicilios y locales comerciales. Especialmente en Huesca, donde se quintuplicaron al pasar de 11 a 51. La Fiscalía de esta provincia apunta que el incremento en este último apartado puede deberse a "una mayor precisión en el registro de estas causas, que en ocasiones se venían anotando genéricamente como robos con fuerza". En Teruel, cuya Fiscalía expresó su "preocupación por el notable incremento experimentado por los delitos contra el patrimonio", la primera infracción creció de cero casos a tres mientras la segunda pasaba de 593 a 765.
El ministerio público también destaca "la importante proporción" de los delitos contra la propiedad en Zaragoza, entre los que se incluyen los daños, "con 15.343 diligencias incoadas y un aumento superior al 100%". La Fiscalía de la capital aragonesa apunta "como posible causa de ese incremento" de las infracciones contra el patrimonio "la celebración en el verano del 2008 de la Expo, durante la que se detectó la presencia de algún grupo organizado de origen croata dedicado a la comisión de robos".
FAMILIA Otro de los delitos que el año pasado experimentó un notable incremento en Aragón fue el impago de pensiones, es decir, dejar de pasar la manutención a los hijos cuya custodia mantiene el excónyuge o a este. Las diligencias abiertas por esta causa pasaron de 193 a 321, con aumentos porcentualmente más acusados en Teruel --de 14 a 27-- y Huesca --de 39 a 66--.
La Fiscalía zaragozana alerta del aumento de algunos delitos contra las personas como los homicidios --8 en el 2008 por 2 en el 2007-- y las lesiones, que crecieron un 115% al llegar a 33.875.
BODAS BLANCAS El Ministerio Público también destaca en Zaragoza "el enorme aumento de los matrimonios ilegales, cuyas diligencias previas ascienden de dos a 28", y el de los abandonos de familia, que suben de 117 a 183.
"Otra tendencia preocupante que se consolida --señala-- es la del ascenso de las diligencias incoadas por tráfico de drogas", con 138 asuntos en un año.
La Fiscalía también vincula el efecto llamada de la Expo para inmigrantes sin papeles con el aumento de los casos de falsificación de documentos --de 48 a 123-- y los delitos contra los derechos de los extranjeros --de 8 a 49--.
Por último, la memoria destaca en Huesca la "importante incidencia de las peleas que se producen en locales donde se venden bebidas alcohólicas". Los casos de lesiones pasaron de 1.413 a 3.027.
Según la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio del Interior, en España existen actualmente un total de 76.546 personas internadas en los centros penitenciarios de todo el país, de éstas 59.848 son penadas (78,19%) y 16.698 están preventivas (21,81%). El porcentaje de mujeres sigue siendo muy inferior al de hombres, un 7,95% frente a un 92,05% (6.087 mujeres y 70.459 hombres).
Mientras que en todo el Estado, el número de presos este mes de septiembre se ha incrementado (de 76.523 a 76.546), en Aragón ha descendido de los 2.577 a 2.542 presos. En un año, el número de presos en la Comunidad ha bajado casi un 2% (1,8%) de los 2.586 a los 2.542.
Aragón se integra en la Zona 3 del orden territorial de Instituciones Penitenciarias que acoge esta Comunidad, junto con La Rioja y Navarra. La cifra de personas encarceladas en las tres cárceles que posee Aragón (Zuera, Daroca y Teruel) se sitúa en los 2.542 a fecha del 11 de septiembre de 2009. De éstos, 271 son preventivos y 2.271 son penados.
A fecha de julio de 2008, en los centros penitenciarios aragoneses se han realizado 24 acciones de formación ocupacional con 517 alumnos y cinco acciones de orientación para la insercción laboral con 75 alumnos.
La Comunidad Autónoma de Aragón está en el octavo puesto del ranking nacional en número de encarcelados siendo el 3,3% del total nacional, subiendo un escalón. En el primer puesto se encuentra Andalucía con 17.711 presos y en el último, Navarra con 273 personas en privación de libertad.
En el 2009, en todo el país ha subido la cifra de presos hasta los 76,546 presos, 3.065 encarcelados más que en 2008, cuando había 73.481 personas encerradas. Desde 1999 la cifra casi se ha duplicado, cuando había 45.384.
Un total de 125 presos se suicidaron en las cárceles españolas entre los años 2004 y 2007, según datos facilitados por el Gobierno en una respuesta parlamentaria al Grupo Popular a la que tuvo acceso Servimedia.
Aunque las cifras de sucidios han descendido en esos cuatro años, se mantiene en un elevado número. En 2004, un total de 40 presos se quitaron la vida, cifra que descendió a 33 en 2005, y pasó a 23 en 2006, para ascender de nuevo a 27 casos en 2007.
Los penales en los que más suicidios se registraron en esos 4 años fueron Valencia, Villabona, Nanclares de Oca y Alicante, que registraron 7 casos cada una en el cuatrienio analizado.
Zaragoza y Albolote se sitúan a continuación con 6 casos en cada una. Con 5 muertes se coloca Sevilla 2 y con 4 están los centros penitenciarios de Alama, Almería y Palma de Mallorca.
En ese mismo período se registraron 169 fallecimientos a causa del consumo de drogas en las prisiones españolas, exceptuando las catalanas cuya competencia está cedida a la Generalitat.
A diferencia de las muertes por suicidio, que se han reducido ligeramente, los casos de fallecimiento por drogas siguen creciendo en las prisiones españolas.
Si en 2004 hubo 39 muertes relacionadas con el consumo de estupefacientes, al año siguiente fueron 43 las registradas. En 2006 se repitieron 43 casos de fallecimiento por drogas y en 2007 la cifra aumentó hasta 44.
Según los datos facilitados por Interior en ese período también quedaron registradas 6 muertes por agresión y 11 más por accidente. ECODIARIO - SERVIMEDIA.-
Las cárceles de Aragón registraron 14 casos y 28 denuncias por tortura y otros actos vejatorios, según la Asociación de Seguimiento y Apoyo a Pres@s en Aragón (Asapa). En lo que va de año, sólo el 20% de las quejas por malos tratos han sido denunciadas en la sede judicial por sus víctimas.
Durante 2008, se produjeron 579 denuncias por tortura y otros actos vejatorios en las cárceles españolas. De ellas, 28 pertenecen a las cárceles de Zuera y Daroca, en Aragón, según la Asociación de Seguimiento y Apoyo a Pres@s en Aragón (Asapa).
De las conclusiones de este informe, se desprende también que el número de denuncias en Aragón (2,11 denuncias por cien mil habitantes) está por encima de la media nacional (1,25 denuncias por cien mil habitantes). Ceuta, Navarra, País Vasco y Madrid, entre otras, también superan la tendencia. Unos datos que muestran la relación entre la existencia de organizaciones de defensa de los Derechos Humanos y el mayor número de denuncias por malos tratos y torturas.
Este informe también refleja el aumento de malos tratos por parte de los cuerpos policiales a menores, inmigrantes y detenidos en actos festivos o deportivos.
El portavoz de Asapa, Pablo Jiménez, ha destacado que en lo que llevamos de año sólo el 20% de las quejas por actos vejatorios han sido denunciadas por sus víctimas como consecuencia de la inactividad judicial y la conciencia de indefensión por parte de los presos.
En este sentido, ha criticado las declaraciones del delegado del Gobierno negando la existencia de este problema y deslegitimando a las asociaciones que luchan por eliminar esta práctica generalizada en las cárceles del Estado español.
El portavoz de Asapa, así como los miembros procedentes de otras asociaciones de Cataluña y el País Vasco, han puesto de manifiesto la necesidad de la voluntad política para resolver este problema endémico en las cárceles españolas. Aragón digital
En las cifras se incluyen los 6 fallecimientos ocurridos en centros tutelados por el Estado durante 2008. Como el fallecimiento ocurrido el 6 de enero por un traslado demasiado tarde al hospital al no haber conducciones suficientes. Heraldo de Aragón
Los delitos cometidos en el año 2008 en Aragón aumentaron un 9,4 por ciento respecto al 2007, al pasar de 20.047 a 21.933, y fueron los maltratos en el ámbito familiar y contra la seguridad vial los que más incrementaron, un 38 y un 43 por ciento, respectivamente.
El delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, ha explicado estos datos en una conferencia de prensa en Zaragoza, a la que también han asistido el responsable de la Guardia Civil en Aragón, Rafael Ferrera, y el jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía, Leoncio Lorente.
Aragón es la quinta Comunidad Autónoma con mejores índices en seguridad ciudadana y, por provincias, Teruel y Huesca se encuentran entre las tres con menor tasa de criminalidad del país, mientras que Zaragoza está en el puesto 24, a pesar de ser una de las más grandes en población, ha recalcado Fernández.
El número de delitos aumentó en 2008 un 9,4 por ciento, pero el delegado ha explicado que han sido dos los que han tenido un incremento más significativo: los maltratos en el ámbito familiar (38%) y aquellos contra la seguridad vial (43%).
En el primer caso, el delegado ha hecho hincapié en que han aumentado mucho las denuncias, un dato malo por una parte pero "bueno" por otra, ya que cuando una mujer denuncia se pueden poner los medios para protegerla. En estos momentos, en la Comunidad hay 1.919 mujeres con algún grado de protección.
Respecto a los delitos contra la seguridad vial, los más habituales son la excesiva velocidad, conducir bajo los efectos del alcohol y las imprudencias, y en el primer trimestre de 2009 han aumentado un 105 por ciento, según ha dicho Rafael Ferrera.
También han aumentado de forma significativa en 2008, un 40 por ciento, los casos de pornografía de menores, un delito "especialmente repugnante" a juicio de Fernández, quien ha insistido en que los agentes que se dedican a estas cuestiones deben tener "una preparación muy específica" y su trabajo en ocasiones "no se ve".
La tasa de delitos contra la libertad sexual se situó en 21,3 por cada 100.000 habitantes en 2008, algo superior a la de 2007 (19,6), mientras que en el caso de las agresiones más graves la tasa es de 3,5 frente a 4,6 del año anterior.
Por su parte, han descendido un 43 por ciento los homicidios y asesinatos y se mantienen estables otros delitos de lesiones (334 en 2008 y 330 en 2007), mientras que los delitos contra la propiedad han pasado de 14.746 en 2007 a 16.005 en 2008.
Los robos con fuerza han aumentado un 11% y las estafas un 29%, pero han descendido los robos con violencia e intimidación (10%); los daños (10,2%); las sustracciones de vehículos (19%); y los delitos contra la propiedad intelectual e industrial (21%), según se incluye en el balance de la delincuencia del pasado año.
Respecto al tráfico de estupefacientes, han aumentado las intervenciones un 13 por ciento (de 215 a 243 casos), al igual que las actuaciones policiales en el ámbito de la prevención, un 44,7%, y los detenidos, un 12,26%, según Lorente.
Ha explicado que, de forma global, en 2008 el número de hechos esclarecidos fue 10.409 frente a los 9.782 de 2007, mientras que los detenidos fueron 7.016 frente a los 6.481 de 2007.
La Exposición Internacional que se celebró en Zaragoza el pasado verano no provocó un aumento de los delitos ni de los detenidos, por lo que a juicio del jefe de la Policía Nacional los resultados desde el punto de vista de la seguridad fueron "muy buenos", teniendo en cuenta la importante afluencia de personas en la ciudad. EFE
Un estudio jurídico-técnico elaborado por el Justicia de Aragón -el equivalente regional al Defensor del Pueblo- propone sanciones alternativas a la cárcel para prevenir la violencia de género. El Justicia, Fernando García Vicente, no cree que la prisión sea siempre la solución más adecuada, porque puede «exacerbar» el problema. Es una de las conclusiones que García Vicente expuso ayer ante las Cortes de Aragón, durante la presentación de ese estudio, titulado «Modelos de actuación en violencia de género». El documento recoge nuevas propuestas para luchar de forma más eficaz contra la violencia machista. Un objetivo prioritario, según el Justicia de Aragón, es conseguir que las víctimas puedan denunciar de forma más ágil y con menos presión social o de su entorno personal. Para ello, el estudio propone dos nuevas figuras técnicas, que denomina «denuncia puente» y «denuncia oculta». Nuevos tipos de denuncia Cuando una mujer está siendo maltratada, uno de los pasos más difíciles de dar, según los expertos, es el de presentar la denuncia. A veces es por miedo a las represalias; otras, por una cuestión de dependencia respecto a la pareja, por temor a que vaya a la cárcel y ella se quede totalmente desamparada. Por eso, según el informe presentado ayer, es necesario que se habiliten fórmulas jurídicas que tengan en cuenta todo eso. El primer tipo de denuncia que propone el Justicia de Aragón consiste en sustituir la cárcel por sanciones alternativas para el maltratador, someterlo a tratamiento y darle una segunda oportunidad. Eso sí, esta opción sólo cabría si la víctima la admite y hay un informe favorable de un profesional que analice el caso y los riesgos. Esta propuesta está pensada para aquellas mujeres maltratadas que no quieren denunciar a sus parejas porque no desean que estos vayan a la cárcel. Como solución a este recelo se plantea este nuevo modelo denominado «denuncia puente», en el que prima la reinserción y que busca acabar con la violencia sin que el maltratador tenga que ir a prisión. Por su parte, la «denuncia oculta» está pensada para aquellas mujeres que no denuncian por miedo a las posibles represalias. En este caso, sería un tercero el que haría de intermediario para presentar la denuncia y así se evitaría un enfrentamiento directo entre la víctima y su agresor. Alternativas a la cárcel En estos momentos, en las cárceles de España hay 70.000 hombres acusados de maltratar a sus parejas. Sin embargo, según el Justicia de Aragón, ésta no es la solución, ya que las estadísticas demuestran que el problema persiste e incluso sigue aumentando. Por eso, el informe presentado ayer propone cambios en el sistema punitivo a maltratadores y apuesta por la reeducación en los casos de inadaptación social. También aboga por el tratamiento de enfermedades como el alcoholismo, que a menudo están en el origen del maltrato. El actual sistema punitivo «no es bastante», aseguró el Justicia. Cree que después de pasar por prisión el riesgo de que la mujer vuelva a ser maltratada «es mucho mayor». García Vicente recalcó que la estancia en el centro penitenciario debe ser aprovechada para la reinserción. El informe que recoge estas propuestas ha sido elaborado por un equipo encabezado por el director del Instituto de Medicina Legal de Aragón, Juan Antonio Cobo, e incluye un amplio trabajo de campo hecho en las prisiones de Zuera y Daroca, en el centro de inserción social «Las trece rosas» y en el Juzgado de Guardia de Zaragoza. Además de las propuestas citadas, se recogen otras conclusiones que apuntan que el riesgo de que las mujeres inmigrantes sufran malos tratos es mucho mayor. En concreto, calcula que es ocho veces mayor que en el caso de las mujeres españolas. Para el Justicia de Aragón esto se debe a problemas culturales. «Para algunas culturas es muy difícil asumir ciertas circunstancias que se dan en nuestra sociedad, como el hecho de que las mujeres trabajen y ellas no. Esta simple diferencia puede desembocar en malos tratos». Otro de los puntos en los que más enfatiza este informe es que en la mayoría de los casos las mujeres no son conscientes del riesgo que corren, ya que según García Vicente tienen una «percepción errónea de su maltratador y sólo tienden a recordar los buenos momentos de la relación. ABC
El número de suicidios ha bajado más de un 50% en las cárceles españolas en los últimos cinco años, de 40 a 19, tras la puesta en marcha en 2005 de un plan de choque que introdujo la figura de los presos de apoyo a potenciales suicidas. De las 40 muertes por este motivo en 2004 se pasó a 33 en 2005, 25 en 2006, 14 en 2007 y 19 en 2008, año que registra un repunte dentro de la tendencia descendente.
Tras alcanzarse el pico de 40 en 2004, la máxima responsable de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, encargó un estudio sobre la cuestión. Después de evaluar sus resultados, activó un plan que implicaba a todo el personal penitenciario y oficializaba una nueva figura, el preso de apoyo o interno sombra, dentro de un amplio programa de prevención de suicidios que ha rendido buenos resultados.
"Son presos de un perfil estable, motivado, de buen comportamiento, con experiencia y habilidades de comunicación", explica José Manuel Arroyo, subdirector general de Sanidad Penitenciaria. La decisión de qué presos pueden ser de apoyo y cuáles se acogen al Protocolo de Prevención de Suicidios (PPS) se adopta en la junta de tratamiento con informes médicos y de funcionarios. El reo sombra, además de informar, acompaña al preso acogido al PPS en las zonas comunes y en las subidas voluntarias a la celda, que comparte con él hasta que se desactiva el protocolo.
Estos reclusos, antes de poder ejercer esta responsabilidad, reciben nociones médicas y psicológicas. En cuanto al número, aunque no hay datos oficiales, Arroyo calcula son cinco por cada 2.000.
Nadie discute su mérito en el descenso del número de suicidios, dentro de otros muchos factores. Un preso sombra pudo evitar, por ejemplo, la muerte por ahorcamiento de Miguel Carcaño , principal inculpado del caso de la desa-parición de Marta del Castillo. A cambio de funciones como esta, estos internos reciben beneficios penitenciarios. "Las compensaciones no son económicas, sino en vis a vis, comunicaciones, permisos...", explica José Manuel Arroyo.
El recluso de apoyo responde al modelo de listener, algo así como el "escuchador", de las cárceles inglesas. Debe ser acompañante y consejero de los internos acogidos al PPS, creado en 2005. En líneas generales, el perfil de riesgo de suicidio es el del joven primerizo, con la perspectiva de una condena larga y acusado de un delito de impacto social, sobre todo si es sexual. Y la situación más peligrosa, la que hay que evitar a toda costa, es la del preso solo en su celda.
La tasa de suicidios, teniendo en cuenta el incremento de la población reclusa, ha pasado de 0,79 a 0,26 por cada mil presos desde 2004, según Instituciones Penitenciarias, que advierte de que se trata de "una cuestión muy delicada", por lo que conviene evitar todo triunfalismo, más aún cuando el promedio de suicidios, en España y fuera, es diez veces superior en prisión que en libertad.
ONG y sindicatos combinan el reconocimiento de los méritos del plan con ciertas críticas concretas. "El PPS ha funcionado, es evidente. Los funcionarios están atentos y el interno de apoyo es importantísimo, pero algo sigue fallando cuando mueren casi dos al mes", afirma Valentín Aguilar, responsable de Prisiones de la Asociación Pro Derechos Humanos, que insiste en que "la laguna sigue estando en las personas con problemas mentales".
Claudio Esteban, coordinador de Prisiones de CSI-CSIF en Andalucía, subraya que "no se cuentan como suicidios las muertes por sobredosis, y muchas lo son". Desde Instituciones Penitenciarias replican que jamás se han contabilizado porque entran dentro de otra categoría. También recalcan que las muertes por droga suelen ser más veces por dosis adulteradas que por dosis excesivas.
El PPS y el interno de apoyo sirven sobre todo para conjurar el miedo escénico de las primeras semanas. "Ya no está ese fatídico primer día que antes pasaban solos, muertos de miedo. Ahora se les presta atención. Eso lo hemos ganado. Pero el que se quiere suicidar, al final, se suicida", afirma un jefe de servicios con 25 años de experiencia. José Manuel Arroyo asegura que la mayoría de los suicidios son de presos no acogidos al protocolo preventivo.
"La clave no está sólo en estas medidas", opina una funcionaria, orgullosa de la dimensión social de su trabajo. "Lo importante es que se sientan personas. Que, aunque hayan perdido la libertad, conserven todos los demás derechos", afirma. José Colón A. MUNÁRRIZ / R. PÉREZ
El Centro de Solidaridad de Zaragoza (CSZ) ha presentado este miércoles su memoria anual de 2008. Más del doble de personas de entre 18 y 25 años atendidas en el centro residencial de Proyecto Hombre y un 24% más de jóvenes en situaciones de riesgo, un 21% de usuarios atendidos sólo por problemas de alcohol, un repunte en el consumo de heroína hasta llegar al 32% de los programas ambulatorios o un incremento de las mujeres participantes en el programa residencial hasta alcanzar el 20% son algunos de los datos más llamativos respecto a 2007.
A lo largo del año pasado fueron 1.337 las personas que participaron en alguno de los problemas de superación y prevención de adicciones, lo cual supone un incremento del 11% respecto al año anterior. A pesar del aumento de dependientes del alcohol y la heroína, el director de programas de Proyecto Hombre, José Antonio Gimeno, ha señalado que las drogas preferidas de consumo siguen siendo la cocaína, el hachís y la marihuana, con un incremento del speed y la heroína.
La memoria refleja que dentro del programa Proyecto Hombre, que este año ha superado su nivel histórico de ocupación residencial con 175 personas, la cocaína se convierte en la principal sustancia de consumo con el 58,5% de los casos, seguida del speed con el 14,6%, el alcohol (12,1%) y la heroína (9,75%).
En total, el número de personas atendidas con problemas jurídico-penales en el CSZ es un 24% mayor que el año pasado, llegando a 648 afectados. En el periodo 2003-2008, las atenciones de este tipo se han incrementado en más del 150%.
Respecto a la atención a población penitenciaria, son 88 los presos que han participado en los programas del CSZ sumando las cárceles de Zuera y Daroca. Un total de 56 internos fueron derivados por Instituciones Penitenciarias o Régimen abierto a los diferentes programas de la Fundación. Además, se realiza un grupo de trabajo semanal en el centro penitenciario, con la presencia de entre diez y doce internos.
La población reclusa aragonesa ha crecido un 129,94% entre el año 2000 y el 2009, según denunció ayer el sindicato de prisiones Acaip, que llama la atención sobre el hecho de que en los últimos catorce meses y medio el número de presos en toda España ha crecido a un ritmo insólito y muy rápido. En estos momentos, las cárceles de todo el país albergan 74.961 reclusos, por lo que el grado de hacinamiento supera el 200% en veinte centros penitenciarios, según la organización.
En el caso de la comunidad aragonesa, en el periodo estudiado el número de presos ha pasado de 1.139 a 2.169, es decir, un incremento neto de 1.480 personas. Entre el 2007 y el 2008, el aumento fue de 119 reclusos, mientras que desde el 2008 hasta el 2009 ingresaron 62 nuevas personas.
Sin embargo, ninguno de los dos penales aragoneses (Zuera, Daroca y Teruel) figura entre los que registran una mayor tasa de hacinamiento. Este listado está encabezado por Martutene, en Guipúzcoa, seguido de Ceuta, Basauri (Vizcaya), Murcia, Ibiza, Puerto II (Cádiz) y Pamplona.
Para Acaip, "el aumento de población reclusa en el 2008 es el mayor que se registra durante el periodo democrático", con un incremento diario de 17 presos. Asimismo, el sindicato afirma que el pasado año el 50,46% de los nuevos reclusos eran extranjeros y que la la ampliación del número de celdas y la construcción de más cárceles no resolverá el problema. 19/03/2009 EL PERIÓDICO DE ARAGÓN
La patología mental y la prisión tienen una estrecha relación. Según el Informe de prisiones de 2007" el 25 % del total de reclusos españoles padecía algún tipo de patología mental, mientras que solo un 17,6% tenía antecedentes psiquiátricos antes de su ingreso en la cárcel. De estos, un 3,2% había estado ingresado en un centro psiquiátrico. Además, el 8% de los reclusos tenía psicosis graves, como esquizofrenia o trastorno de personalidad, una prevalencia que se reduce a la mitad en la población general. El 8% era psicótico y, según indicaron los facultativos, debería ser tratado en psiquiátricos.
Unos datos que reflejan un perfil psiquiatrizado de gran parte de la población penitenciaria, que si bien es patente en muchos casos antes de entrar en prisión, se potencia con una estancia prolongada, según plasma el informe La realidad penitenciaria de la Comunidad Autónoma de Aragón, elaborado por Cáritas Diocesana de Zaragoza. El documento recoge que a partir de los dos o tres años empieza un proceso de despersonalización y desocialización de la persona presa, a lo que se añade que alguien que cumple más de diez años de prisión presenta problemas de salud mental.
Un estudio previo de J.M. Arroyo y E. Ortega indica que los niveles de estrés asociados a una estancia dilatada en prisión provocan una elevada prevalencia de trastornos mentales, que a su vez aumenta el número de sanciones por conductas agresivas. A este respecto, el 50% de las consultas de atención primaria en la cárcel de Zuera durante el 2007 tuvo relación con un profundo deterioro de salud mental, el mismo porcentaje de ingresos que se registró en la enfermería del centro por transtornos mentales. De estos, el 56,6% padecía alguna patología dual (existencia simultánea de un trastorno adictivo y un trastorno mental), un 30% sufría trastornos de personalidad, y un 23% tenía un trastorno depresivo asociado a sustancias psicoactivas.
El consumo de drogas es otro de los factores que enfatiza este perfil psiquiátrico, además de ser la primera causa de muerte en las cárceles españolas. Según un estudio de la Universidad Abierta y a Distancia, al menos el 19,9% de los reclusos consume cocaína y el 16,9% heroína (igual que hachís). Así, una de cada cuatro muertes en los centros penitenciarios está provocada por drogas. Respecto a otras enfermedades, el 10% de los presos españoles está infectado por el VIH, casi el 40% padece hepatitis C y el 35% tiene infección tuberculosa. El Periódico de Aragón
El 49% de los presos que han cumplido condena en alguno de los centros penitenciarios de Aragón ha vuelto a cometer algún delito, más de la mitad de ellos en menos de dos años y la tercera parte en menos de seis meses desde que salieron de la cárcel.
Estos datos se recogen en un informe pionero publicado por Cáritas y Pastoral Penitenciaria que analiza la realidad de las prisiones aragonesas y propone medidas como la creación de un Observatorio sobre este ámbito, en el que participarían las administraciones públicas, penitenciarias, patronales, sindicatos, universidad y todo el tejido social relacionado con la cárcel.
La sociedad quiere seguridad y construye prisiones alejadas de la población, de donde subyace una filosofía "muy pesimista" que considera que el hombre no tiene capacidad de recuperar su dignidad como persona, ha explicado en la presentación del informe el director de Cáritas Zaragoza, Carlos Sauras.
El estudio apunta directamente a los problemas de un sistema que hasta ahora se ha preocupado más por la delincuencia que por las causas que llevan a ella, como la criminalización de la pobreza, "muy relacionada con la exclusión, el delito y la cárcel", ha indicado el secretario general de Cáritas Zaragoza y voluntario de Pastoral Penitenciaria, Carlos Piñeyroa.
En su opinión, la prisión ya no es válida como única solución al delito y a la seguridad ciudadana, por su falta de recursos e incapacidad de afrontar una realidad en la que el delito tiene una enorme parte de responsabilidad social y las prestaciones y servicios públicos para la reinserción son "inadecuados, insuficientes, demasiado burocráticos y lentos".
Según el informe, el perfil del preso no ha cambiado mucho desde los años noventa (varón español de entre 21 y 41 años, con bajo nivel formativo y problemas de salud mental y adicción a drogas, condenado a una media de 8,3 años), aunque se ha añadido el colectivo inmigrante y los enfermos mentales.
También se acusa al ordenamiento jurídico de no ser aséptico porque en los últimos años se han agravado los tipos cometidos por las personas en exclusión social, como los delitos contra la salud pública, la propiedad industrial e intelectual y los relacionados con la inmigración clandestina, lo que demuestra que "se ha abordado un problema social desde una perspectiva penal".
Además, se destaca el papel del entorno socioafectivo de los presos (familia y entidades sociales) para hacer que la estancia en prisión y la reinserción lleguen a buen término y dañen en la menor medida posible la salud mental y emocional de los internos.
Por otro lado, se acusa a algunos medios de comunicación de vender una imagen de morbo e inseguridad ciudadana sobre los delincuentes que repercute en el imaginario colectivo de la sociedad, a pesar de que España es el quinto país con una menor tasa de criminalidad de Europa (50,7 infracciones por cada mil habitantes, 35,5 en Aragón) o que el índice nacional de quebrantamientos de permisos penitenciarios es de 0,58 por ciento.
Además del Observatorio Penitenciario de Aragón, en el estudio se hacen propuestas como la aplicación de la justicia restaurativa (que tiene en cuenta la reparación de la víctima y la reinserción del delincuente), reformas legislativas y un aumento de la los recursos y la coordinación entre administraciones.
En noviembre de 2008, en Aragón cumplían condena en los centros penitenciarios de Aragón 2.394 hombres y 150 mujeres, el 73 por ciento en Zuera, el 20 en Daroca y el 7 en Teruel. EL PERIODICO DE ARAGON
