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BOQUERÓN

Las prisiones presentan una tasa de hacinamiento del 172%

Los presos se amontonan en las tres prisiones aragonesas. Así lo ha puesto de manifiesto un informe del sindicato penitenciario Acaip, que sitúa la tasa de hacinamiento de las cárceles en un 172,13%, un porcentaje que coloca a la comunidad aragonesa algo por debajo de la media nacional (173,21%) y en el puesto número 11 de las 19 comunidades y ciudades autónomas. En total, Aragón cuenta con 1.507 plazas o celdas funcionales para una población reclusa que el pasado 19 de marzo era de 2.594 internos, 50 menos que en 2009.

De los tres centros penitenciarios de Aragón el que presenta un mayor grado de masificación es el de Teruel, dado que sus 75 celdas albergan 191 reclusos, lo que significa una tasa de hacinamiento del 254,67%.

La prisión turolense es la novena más sobreocupada de España. Está lejos de la de Martutene (Bilbao), que con el 437,86% es la cárcel más superpoblada de España, pero muy por delante de la de Zuera, que se sitúa en el puesto número 38, con 1.862 internos para 1.110 celdas funcionales, lo que arroja un porcentaje del 167,75%, incluyendo los centros de inserción social de Zaragoza y Huesca. El centro penitenciario de Daroca, en cambio, no figura en la lista de las prisiones más saturadas, calificación que merecen 41 cárceles en total.

El hacinamiento en las cárceles aragonesas es un fenómeno que se ha ido acelerando a medida que avanzaba la década 2000-2010, ya que en este tiempo se ha pasado de 1.139 a 2.594 presos. El incremento entre una y otra fecha ha sido de 1.455 presos o, en términos porcentuales, de un 127,74%, solo por detrás de la Comunidad Valenciana, que ha experimentado un crecimiento del 140,12%.

RALENTIZACIÓN El aumento del número de reclusos en Aragón, según Acaip, se ha ralentizado, últimamente, pues entre el 2008 y el 2009 el incremento fue solo de 87 reclusos, lo que llenó los presidios un 3,40% más.

Acaip señala en su informe que en la actualidad las cárceles españolas albergan más de 76.756 presos, de los cuales 27.067 (el 35,51%) son extranjeros y 3.198 han ingresado en los últimos 14 meses. Estos valores colocan a España en el puesto número cinco de Europa por su población reclusa, por delante de 52 países.

Lo preocupante es que la población reclusa no para de crecer, dado que actualmente avanza a un ritmo de 8,68 presos cada día. El año más negro fue el 2008, con 6.381 nuevos internos, la cantidad más elevada de la democracia, que se nutrió sobre todo de los nuevos delitos contra la seguridad del tráfico.
26/03/2010 EL PERIÓDICO DE ARAGÓN

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