Piden 14 años de cárcel para un preso que apuñaló a un vigilante durante un permiso
En mayo de 2002 fue condenó a tres años y medio de cárcel por un robo con violencia e intimidación; un año después, otro juzgado le impuso otros tres años y once meses por un hecho similar. Cumplía condena en la prisión de Zuera -Zaragoza-. En marzo de 2007, le fue concedido un permiso de seis días. No regresó. Aprovechó una libertad de la que disfrutaba sin tener derecho a ella para reincidir: seis días después de que hubiera expirado su permiso, entró en un supermercado de Alzira, se hizo con la recaudación de una de las cajas a punta de navaja y apuñaló al vigilante jurado que intentó darle alcance cuando se dio a la fuga con el botín.
Eduardo M.M. se sentó ayer en el banquillo de los acusados para responder de los delitos de robo con intimidación y uso de armas y homicidio en grado de tentativa. El fiscal pide que sea condenado a 14 años de cárcel: cinco por el delito de robo con intimidación y uso de armas y nueve por la tentativa de homicidio. Aprecia la agravante de reincidencia y disfraz y las circunstancias atenuante de drogadicción. El juicio comenzó ayer en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Valencia.
Los hechos ocurrieron el 5 de abril de 2007. Dice el fiscal que el causado había ingerido sustancias estupefacientes, pero que éstas «no mermaban su capacidad intelectiva y volitiva». Según el relato del Ministerio Público, aquel día, por la tarde, entró en el supermercado «DIA» de la calle Virgen de la Murta, en Alzira. Adoptó sus cautelas para evitar ser descubierto. Utilizó las mangas de una camiseta para cubrir su cara y «desfigurar su apariencia». Se acercó a una de las cajeras; le tendió una bolsa blanca y le exigió que introdujera en ella el dinero que había en la caja, unos 335 euros. Y para vencer la resistencia de la mujer, le colocó un cuchillo en el cuello y luego en la espalda. Un cliente se percató de lo que estaba ocurriendo. Alertó a otra trabajadora y ésta dio el aviso al vigilante de seguridad. Cuando éste llegó a la zona de las cajas, el atracador se había marchado con su botín. El vigilante salió tras él. Le dio alcance junto a un coche tras el que se había parapetado el atracador para liberarse del disfraz. Forcejearon. El acusado le lanzó varias cuchilladas a la zona del corazón. Le hirió en el costado. Fue detenido momentos después por la Policía Nacional.
I.R.T. - ABC
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