Un valenciano muere en la cárcel de Zuera al caer de una silla cuando cambiaba de canal

Un recluso valenciano murió el lunes en un hospital de Zaragoza como consecuencia de las gravísimas heridas sufridas un día antes al caer de una silla cuando trataba de manipular el televisor de uno de los módulos de la cárcel de Zuera, donde estaba interno desde hacía unos meses.
El accidente, según explicaron ayer fuentes penitenciarias, se produjo en la tarde del domingo en la sala de estar de uno de los módulos de los que consta esa cárcel. El interno, J.M.E.Q., que tenía 33 años y era natural de Valencia, estaba viendo la tele junto con otros reclusos y, en un momento determinado, se levantó para cambiar de canal —no disponían de mando a distancia—. El hombre cogió una silla, se subió y, en ese momento, se cayó al suelo con tan mala fortuna que se dio un golpe tan fuerte en la cabeza que le provocó una fractura de cráneo.
Las mismas fuentes agregaron que, nada más producirse el accidente, varios internos y los funcionarios que había en el recinto acudieron en su ayuda y alertaron a los servicios médicos de la prisión. El facultativo, tras examinarle y ver la gravedad de su estado, solicitó una ambulancia urgente que lo trasladó al centro sanitario. Sin embargo, J.M.E.Q. moría a la mañana siguiente, sin que los médicos pudieran hacer nada por salvarle la vida.
Las mismas fuentes explicaron que el interno, que tenía nueve causas judiciales en vigor, todas ellas por delitos contra el patrimonio, ya había sufrido episodios de pérdida de la conciencia con anterioridad, al parecer, porque padece problemas de coagulación. Por ello, será la autopsia, practicada ayer, la que determine si la caída que le provocó la fractura craneal letal fue por un despiste o si, por el contrario, se precipitó con tanta violencia contra el suelo porque había perdido el conocimiento.
J. M. E. Q., que tiene varios hermanos en otros centros penitenciarios, estaba en prisión por nueve delitos de robo, robo con violencia y robo con intimidación. En algunos casos, cumplía condena y en otros aún estaba pendiente de ser juzgado.
El hospital zaragozano alertó a Instituciones Penitenciarias y a la familia del recluso a las dos de la tarde del lunes, según las fuentes antes citadas, que matizaron que se trata «sin lugar a dudas» de una muerte accidental, ya que las cámaras de seguridad de la sala de la televisión registraron el hecho. «Coincide lo que contaron sus compañeros y los funcionarios, y lo que más tarde se vio en las grabaciones. Ha sido un desgraciado accidente», dijeron.

T. DOMÍNGUEZ - www.levante-emv.com - 6-4-2011