Un recluso de Zuera aprovechó una visita a la Expo para fugarse

Un recluso que se hallaba cumpliendo condena en el centro penitenciario de Zuera aprovechó una visita a la Expo de Zaragoza, el pasado sábado, para fugarse sin dejar rastro. El preso, que iba en un grupo de otros 15 reos, solicitó permiso para ir al servicio y, tan pronto como se vio solo, se mezcló con los visitantes del recinto (ese día se estableció el récord con más de 133.000) para salir de la instalación sin despertar sospechas. El presidiario estaba cumpliendo una condena de doce años por tráfico de drogas y tenía pendientes todavía cuatro años y medio.

Al parecer, la fuga se produjo durante una actuación de un grupo musical de la prisión de Zuera denominado Los Duendes, a los que acompañaban distintos miembros del personal de la cárcel, desde funcionarios dedicados a tareas de vigilancia y jefes de servicio a educadores, capellanes y psicólogos. Precisamente, una psicóloga era la encargada de mantenerlo controlado.

DROGA CAMUFLADA
El preso fugado, de unos 45 años y apellidado Vargas, había sido seleccionado por el equipo de tratamiento con un mes de antelación, por considerar que reunía condiciones para abandonar temporalmente el centro de reclusión. Pero su evasión no fue la única consecuencia de la salida de la prisión junto con otros presidiarios que habían observado buena conducta.

Al regreso al centro penitenciario, los funcionarios que se hallaban de servicio en la entrada a los módulos de presos descubrieron que los instrumentos musicales de Los Duendes escondían en su interior diversas cantidades de droga, dinero e incluso móviles que los presos se habían procurado en el exterior del recinto carcelario durante las horas que habían estado fuera.

Por otro lado, se da la circunstancia de que la mujer de Vargas se halla en busca y captura después de que, meses atrás, aprovechara un permiso de salida de la prisión para escaparse.

CON DERECHO A ´FAST PASS´
La visita a la Expo se había concebido como un premio a los reclusos que, con su respeto a las normas del centro y su conducta, se ganaron la confianza de los responsables de su vigilancia, atención y seguimiento.

Por este motivo, los reclusos seleccionados accedieron gratuitamente al recinto de la exposición internacional y tuvieron derecho al uso del fast pass para entrar en los pabellones y espectáculos con mayores colas de visitantes.

Entre los funcionarios penitenciaros se comenta que esta fuga ha asestado un duro golpe al sistema de salidas programadas. "La actitud de un solo recluso que ha demostrado que no se merecía salir del centro puede perjudicar a los presos que, con su esfuerzo y su actitud positiva, se han ido ganando el derecho a participar en actividades en el exterior de la prisión", señaló un miembro del personal al tener noticia de lo ocurrido el pasado sábado en la Expo.
>El Periódico de Aragón - 17/09/2008 )